ESET, la mayor empresa de ciberseguridad de la Unión Europea, ha analizado una nueva versión de spyware en Android utilizada por el grupo de delincuentes APT-C-23. El nuevo malware, detectado por los productos de ESET como Android/SpyC23.A, está diseñado sobre otras versiones de spyware con funcionalidades extendidas de espionaje, nuevas funcionalidades de ocultación y una comunicación actualizada con el servidor de mando y control. Una de las maneras en las que el grupo APT-C-23, activo desde 2017 y conocido por sus ataques a organizaciones en Oriente Medio, distribuye este spyware es a través de aplicaciones falsas de mensajería como Threema o Telegram desde una tienda falsa de aplicaciones para Android.
Los investigadores de ESET comenzaron a analizar este malware a partir de un tweet publicado el pasado mes de abril por un investigador y en el que se hablaba de una muestra de malware para Android desconocida y poco detectada. “Colaboramos en un análisis que demostró que este malware era parte de una versión nueva y mejorada del spyware móvil que utiliza el grupo APT-C-23”, explica Lukas Stefanko, el investigador de ESET que ha analizado Android/SpyC23.A.
El spyware se ocultaba como una aplicación aparentemente legítima en una tienda falsa de aplicaciones para Android. “Cuando analizamos la tienda falsa, encontramos aplicaciones legítimas y otras maliciosas. El malware se escondía en aplicaciones que se hacían pasar por Telegram, Threema y AndroidUpdate. En algunos casos, las víctimas acababan instalando tanto el malware como la aplicación falsa”, continúa Stefanko.
Una vez instalado, el malware solicitaba una serie de permisos sensibles, disfrazados de funciones de privacidad y seguridad. “Los atacantes utilizan técnicas similares a las que se usan en ingeniería social para engañar a las víctimas intentando que estas otorguen privilegios sensibles, como permisos para leer las notificaciones camuflados como una funcionalidad de cifrado de mensajes”, detalla Stefanko. Una vez iniciado, el malware puede llevar a cabo una serie de actividades de espionaje basadas en los comandos recibidos desde su servidor de mando y control, como grabar audios, extraer registros de llamadas, mensajes SMS o contactos, robar archivos o incluso leer notificaciones de las aplicaciones de mensajería, grabar llamadas o la pantalla y eliminar notificaciones de las aplicaciones de seguridad incluidas en Android. La comunicación del malware también se ha mejorado, dificultando la identificación por parte de los expertos en seguridad.
El grupo APT-C-23 es conocido por haber utilizado componentes de Android y de Windows en sus operaciones. La primera vez que se descubrió a este grupo fue en 2017 y desde entonces se han publicado numerosos análisis de su malware móvil. Android/SpyC23.A es solamente la última versión de su spyware e incorpora diferentes mejoras que lo hacen aún más peligroso que las operaciones anteriores.
“Para mantenerse protegido del spyware, ESET recomienda a los usuarios de Android instalar solamente aplicaciones desde la tienda oficial Google Play Store, comprobar los permisos que se solicitan y contar con una solución de seguridad especialmente diseñada para dispositivos móviles y que sea de confianza”, concluye Stefanko.
Para más información sobre el grupo APT-C-23, se puede visitar el blog de ESET.