La digitalización y el teletrabajo han llegado para quedarse. Tras la crisis provocada por la Covid19, muchas son las empresas que se han visto obligadas a dar un paso al frente para implementar el teletrabajo. Esta implementación forzosa, ha demostrado que la digitalización es más sencilla de lo que se preveía y que ofrece múltiples ventajas. Los sistemas de comunicación en la nube, herramientas de trabajo colaborativo y centralitas virtuales son los verdaderos protagonistas en este proceso.
En tiempos de crisis, la optimización de costes es uno de los factores más importantes, no sólo en los procesos de puesta en marcha si no en los posteriores de mantenimiento, consumo y obsolescencia. Las #UnifiedCommunications son posible gracias a sistemas como la centralita virtual, que permite tener en una misma herramienta todas las comunicaciones que una empresa necesita, y reducir los costes como ventaja añadida.
Por otro lado, las necesidades cambiantes en todos los sectores económicos, provocan en las empresas cambios en la dirección de sus comunicaciones y objetivos corporativos. El hecho de disponer de comunicaciones #VoIP y herramientas cloud, con todo digitalizado, aporta flexibilidad y escalabilidad a medida de cada situación en la adaptación de las herramientas de comunicación corporativas. De esta manera, es posible aumentar las extensiones, hacerlas versátiles y accesibles desde cualquier lugar, disponer de funcionalidades avanzadas y personalización al máximo nivel, para que siempre estén cubiertas las necesidades concretas de comunicación.
Otra de las ventajas añadidas de la digitalización, es la creciente compatibilidad de integración entre las diferentes herramientas. Ejemplo de ello es la integración de nuestra centralita virtual MeetIP con la solución de comunicaciones unificadas Teams de Microsoft, que permite sacar el máximo partido a ambas soluciones, aportando servicios de operador de valor sobre las ventajas de comunicaciones unificadas de Teams.
La ampliación de recursos técnicos y buena disposición de las empresas al cambio, ha favorecido que muchas empresas hayan podido dar una respuesta a sus necesidades de teletrabajo, pudiendo mantenerse operativos y sin interrupciones en su actividad en pocas horas. Con el paso de las semanas, el éxito es aún mayor, ya que han podido beneficiarse de todas esas ventajas que los sistemas digitales y analógicos anteriores a la crisis no les ofrecían.
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