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14 marzo 2024

La IA generativa en el puesto de trabajo inicia una nueva era de productividad

El puesto de trabajo digital se enfrenta cada vez al análisis de mayores volúmenes datos para responder a los desafíos de un entorno en constante transformación. La Inteligencia Artificial (IA) generativa cambia el foco empresarial de las tareas a los objetivos.

El próximo Congreso&EXPO ASLAN2024, organizado por la Asociación @aslan los próximos 17 y 18 de abril en el Palacio de Congresos de IFEMA, abordará el impacto de la Inteligencia Artificial (IA) en el ecosistema de innovación y transformación digital. En este contexto, el espacio va a contar este año con un espacio dedicado a los retos y desafíos que trae consigo la aplicación de la IA generativa al puesto de trabajo: Enhancing the Digital Workplace with AI.

La aplicación de la IA en la empresa española ya es una realidad. Según un estudio de Amazon Web Services (AWS), su utilización desde 2022 ha crecido un 22% y el 36% de las organizaciones ya está aprovechando sus ventajas. De aquí a 2030, se estima que la IA moverá alrededor de 282.000 millones de euros. Aunque es cierto que esta tecnología hace muchos años que se utiliza, la IA Generativa (AIGen, por sus siglas en inglés), ha marcado un punto de inflexión que va a cambiar la forma en la que se trabaja y se genera contenido, elevando las cotas de productividad. El potencial que trae consigo la AIGen va a permitir a las empresas dedicarse realmente a la estrategia, dejando tareas rutinarias o tediosas a la hiperautomatización inteligente que permite la IA. En esencia, se va a pasar de una orientación a tareas a otra más enfocada a objetivos.

En esta misma línea, además, lejos de suponer una amenaza para el empleado, va a desempeñar un papel inclusivo, pues como afirma Mario Medina, Director General de Ilunion IT Services, “esta tecnología va a eliminar muchas barreras, porque de entrada va a aportar nuevos conocimientos y habilidades a personas que carecen de ellas o que tienen alguna discapacidad, suponiendo un nuevo paradigma a la hora de enfrentarnos al día a día del trabajo”.

De la nube pública a la híbrida

A pesar de estas bondades, la IA Generativa también implica riesgos que no hay que descuidar. Uno de los que aparecen a la cabeza es la seguridad, especialmente de los datos que son, a fin de cuentas, el motor para la AIGen. Dadas las altas capacidades de procesamiento que requiere esta tecnología, la nube ha jugado un papel crucial en su desarrollo y consumo, pero esta circunstancia ha aumentado las inquietudes en torno a la seguridad.

Alejandro Pinto, el responsable de Desarrollo de Negocio y de Sector Público en AWS, afirma que “el hecho solo de residir los datos cerca de donde tú tienes negocio no significa directamente que tengas una mayor protección”. Por este motivo, a la necesidad de cercanía de los datos –en gran parte por una cuestión de latencia y resiliencia- se suma también la de contar con herramientas adecuadas tanto para la nube pública como para entornos híbridos.

Dado que muchas compañías combinan su nube pública con su nube privada, estas herramientas cada vez más miran al PC, que comienza a jugar un papel protagonista a la hora de ejecutar servicios y soluciones con IA. Según explica Patricia Núñez, Product Management and Operations Director de Lenovo, “muchos de esos procesamientos de datos se van a hacer en el propio PC, por lo que de ahora en adelante se va a hablar mucho de chips con NPU (Neural Processing Unit) con un rendimiento de más de 40 TOPS”. Son los ordenadores desarrollados específicamente para estos entornos, los AI PC. En la actualidad, los PC que comienzan a llegar al mercado con este tipo de procesadores arrojan un rendimiento de entre 10 y 15 TOPS (trillones de operaciones por segundo), pero la progresión se acelera.

La clave, el dato

Los expertos coinciden en que la aplicación de la IA al puesto de trabajo digital disparará la productividad. Para ello, como afirma Gartner que sucede en el 42% de las empresas, el mayor reto es el dato, cuyos volúmenes generados son mayores con el avance de tecnologías como el Internet de las Cosas (IoT). Martín Trullas, Advanced Solutions Director de Ingram Micro, está convencido de que tales volúmenes requerirán de “herramientas colaborativas e inteligencias artificiales que sean capaces de interpretarlos y al hacerlo, seremos mucho más eficientes”.

Si hace 20 años el Wi-Fi supuso una revolución para el entorno del puesto de trabajo, ahora lo es la IA y su aplicación transversal en entornos híbridos, tanto a nivel hardware como software, mejorando la protección contra las amenazas, con muchísima mayor capacidad analítica y de proactividad y una automatización de funcionalidad optimizada en todas las áreas de la empresa.

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