Mahou San Miguel es grupo cervecero internacional, de capital familiar 100% español, cuyas ventas en el extranjero ya suponen el 21% del total. Con cerca de 4.000 empleados, una facturación que ronda los 2.000 millones de euros y un crecimiento del 10%, la compañía no ha dejado de invertir en su transformación digital. Su CIO, Ana Ortín, detalla su estrategia de digitalización.
Mahou-San Miguel ha vivido en los últimos años una auténtica transformación digital. ¿Cuáles diría que han sido sus hitos y a qué retos responde?
A pesar de que se presupone que este sector es muy tradicional, lo cierto es que es bastante más dinámico de lo que parece y eso también nos obliga a movernos mucho porque el mercado demanda nuevas formas de conectarnos con los consumidores, con los clientes e, incluso, con nuestros propios empleados. Aunque llevábamos trabajando en la evolución y buscando esa compañía más digital desde hace tiempo, como en muchos casos, la pandemia del 2020 aceleró la adopción y la materialización de muchas iniciativas que llevaban tiempo gestándose en la compañía.
Una cosa que creo que es muy importante para nosotros es el cambio cultural de cómo hacemos las cosas, cómo se abordan los proyectos, cómo trabajamos con esa tecnología… No diría que es más complicado que la tecnología en sí, pero sí más lento, lleva más tiempo.
¿Qué tecnologías despiertan una mayor resistencia al cambio?
Bueno, yo creo que todo aquello que cambia tus formas de hacer implica no tanto una resistencia, pero sí un proceso de aprendizaje, un proceso de interiorización del cambio. Creo que no es tanto una resistencia al cambio como conseguir que las cosas formen parte natural de nuestro día a día, como sucede ahora con las videoconferencias, por ejemplo. Cualquier cambio tecnológico tiene un proceso en las personas y siempre hay que acompañar en el proceso para conseguir esa adopción.
En esta transformación, destaca su apuesta cloud y, concretamente, con AWS. ¿Cuáles son los beneficios de esta apuesta?
Llevamos mucho tiempo yéndonos hacia herramientas cloud. Empezamos mucho más con herramientas SaaS, es decir, con aplicaciones en la nube más que con infraestructura en la nube (IaaS), ya sea pública o privada. Lo hacemos, fundamentalmente, buscando nuevas funcionalidades y una evolución tecnológica continua que nos permita mantenernos actualizados en un momento en el que la velocidad de cambio se incrementa exponencialmente. Es verdad que tenemos algunos proyectos en los últimos años relacionados con AWS, aunque trabajamos con más nubes, porque nuestra estrategia se encamina a apostar por todo aquello que consideramos que está suficientemente preparado, seguro y, sobre todo, que nos va a traer ventaja potencial en el futuro.
¿Qué beneficios os ha aportado?
Hay un punto bastante importante para nosotros, puesto que tenemos muchas ubicaciones y muchas personas trabajando fuera de la oficina, especialmente nuestro entorno comercial que, en ocasiones, ni siquiera tiene oficina. La conectividad de estos profesionales en su día a día es fundamental para nosotros. Todos los entornos cloud nos traen esa facilidad, una forma mucho más inmediata que lo que ha sido toda la vida la tecnología on-premise y eso nos ha llevado también mucho a irnos hacia ese tipo de tecnologías.
¿Cómo se fácil o difícil es la gestión de ese entorno híbrido multicloud?
Bueno, fácil diría que nunca es, porque un entorno variado es complejo por definición, y entonces yo creo que fácil no es. Creo que lo que nosotros estamos trabajando es, a pesar de la diversidad de los entornos, que haya una estandarización en cada una de las naturalezas de estos entornos, de manera que sepamos o trabajemos de una manera uniforme dentro de cada uno de ellos. Es importante establecer una serie de criterios y una serie de principios que nos permitan avanzar en un sentido a la hora de decidir dónde abordamos una iniciativa, así como tener también unos principios que nos permitan tomar esa decisión basándonos también en la escalabilidad futura.
¿Y desde una perspectiva de seguridad?
Estamos poniendo mucho foco en lo que tiene que ver con la gestión de la identidad, esto es, que sea una identidad única independientemente del entorno en el que nos movamos, tanto para todos nuestros profesionales como para los otros stakeholders que trabajan con nuestra tecnología en un momento determinado porque necesitan acceso. Aunque trabajamos en concienciar a nuestros empleados en la gestión de la información y en la gestión de los riesgos, el mundo de la ciberseguridad evoluciona muy rápido y siempre hay alguien pensando en cómo romper todo lo que hayamos podido poner. Por este motivo trabajamos en dos sentidos, por un lado proteger lo que tiene que ver con nuestros dispositivos y asegurar que en ellos la información esté cifrada; y por otro, en que el acceso esté controlado, de modo que ante cualquier sospecha o comportamiento anómalo preferimos pedir perdón porque no te hemos dejado acceder que darte permiso y que luego tengamos un problema.
Claro, porque además en una organización como Mahou-San Miguel, los actores que componen la cadena de valor son de lo más heterogéneo…
Sí, es verdad que nuestra cadena de valor es muy variada. Incluso sin irnos a un entorno como un bar, dentro de nuestro ámbito de proveedores y de partners, tenemos todo tipo de naturalezas. Tenemos empresas pequeñas, autónomos, empresas grandes… El planteamiento es buscar esos puntos de conexión donde podemos tener el eslabón más débil y trabajar conjuntamente con ellos o proporcionarles la solución, trabajando colaborativamente para evitar desde ambos lados tener esos gaps.
La compañía hace ya años que viró hacia un enfoque data-driven. ¿Se ha acentuado aún más esta aproximación con la entrada en juego de la Inteligencia Artificial (IA)?
Hace ya cinco años que nosotros pusimos el foco de una manera relevante en la gestión de la información desde una perspectiva transversal con ese objetivo data-driven. Si en el mercado se dice que el dato es el nuevo petróleo, para nosotros es la nueva levadura porque lo adaptamos a nuestro sector. Es un elemento clave para nosotros y nos ayuda a tener una visión integral de la compañía, a tomar las decisiones de una manera mucho más consistente y mucho más rápida también. Nuestra estrategia en el tema de datos tiene que ver con asegurar la disponibilidad y la gestión de una información gobernada disponible, accesible para todo aquel que la necesite y la pueda utilizar dentro de la compañía. La IA que ahora llamamos tradicional porque si no, nos sabemos diferenciarla de la generativa, lleva mucho tiempo con nosotros aunque no es la misma la de hace siete años que la de ahora.
¿Qué casos de uso han desarrollado con ella?
Tenemos distintos casos de uso que están aportando valor al negocio de forma continua y seguimos incorporando y añadiendo nuevos todos los días. Tenemos casos relacionados con el mercado para identificar con qué clientes podemos tener algún problema y anticiparnos para bajar las tasas de abandono, entender las tendencias de mercado y enriquecer los insights, y todo lo que tiene que ver con la previsión de la demanda y el forecast de lo que se va a vender. En realidad, a estas alturas tenemos casos de uso en casi todos los ámbitos de la compañía, unos con más madurez, otros con menos, unos con mejores resultados y otros con menos. También hemos aprendido que la IA no nos vale siempre para todo y que hay veces que hay que probar y reenfocar el caso de uso porque no hemos tenido la respuesta que esperábamos encontrar y, entonces, tenemos que replantear la pregunta.
En todo caso, lo fundamental es el dato, porque cuando hablamos de IA si el dato que está debajo no es bueno, nunca va a dar un buen resultado. Eso aplica también a la IA generativa, que estamos explorando sobre todo para facilitar la interacción con la información que ya tenemos disponible y acelerar su acceso, que los usuarios no tengan que buscar, sino que puedan preguntar y obtengan las respuestas.
Ligado estrechamente con estas iniciativas está la automatización.
Sí, nosotros en la automatización tenemos dos ámbitos importantes, uno más relacionado con la parte más operacional, que es lo que tiene que ver con la Industria 4.0. Ahí la tecnología siempre nos ha ido ayudando a avanzar en la eficiencia y el control de nuestros procesos productivos y operativos, en materia de gestión de rutas, de almacenes o la trazabilidad. Desde una perspectiva más global, más extrapolada a toda la compañía, es cierto que la automatización de los procesos es algo en lo que también llevamos trabajando tiempo y, fundamentalmente, tiene dos objetivos claros, independientemente del ámbito en el que se haya aplicado. Por un lado, evitar las tareas repetitivas a nuestros profesionales para que puedan aportar valor en otro ámbito en el que su pensamiento, su criterio y conocimiento es fundamental. Y por otro, desde una perspectiva de disminución de errores, obteniendo una fiabilidad mayor de la calidad de la información que va moviéndose a lo largo del proceso.
¿Qué otras tecnologías considera críticas en su proceso de transformación digital?
Todo lo que tiene que ver con los entornos colaborativos y de acceso a la información, entendiéndola como documentación y conocimiento con las personas con las que trabajas para la toma de decisión. Y en ese entorno tan complejo, y como hablábamos al principio, todo lo que tiene que ver con la seguridad, que es un elemento que siempre está en cada paso que damos.
¿Cómo valora la contribución de la Asociación @ASLAN al sector de la innovación y la transformación digital?
Es una asociación que tiene dos puntos muy relevantes. Uno es que da a conocer muchos proyectos que se están haciendo en los distintos sectores del ámbito de la tecnología. Eso es algo que la asociación siempre ha potenciado mucho, primando el conocimiento de los distintos sectores y de los distintos profesionales. Además ayuda a entender las últimas tendencias, asegurando una conversación de calidad alrededor de ellas. No solo lo que pueda ser el hype de turno, sino con conocimiento, con expertos, profundizando en ese tipo de conocimiento que nos ayuda también a todos a ir centrando y no solo a escuchar los cantos de sirenas que a veces aparecen en la tecnología de un día para otro. Con lo cual, creo que es un elemento que genera mucha visibilidad de este sector, de la tecnología general y posiblemente una fuente de inspiración según donde tengas que poner el foco en cada momento.
¿Qué actividades de las que organiza la Asociación le parecen más interesantes y provechosas para su organización?
A veces no es fácil, pero intentamos que alguien del equipo se acerque al Congreso todos los años porque siempre hay ponencias interesantes, te permite mantener el contacto también con fabricantes, con otros profesionales del sector a los que no es fácil ver. Yo creo que es uno de sus elementos distintivos, siempre merece la pena buscar un hueco para acercarse al menos un rato. Por otro lado, los informes de tendencias están muy trabajados, con una profundidad que probablemente no siempre es fácil encontrar y son muy objetivos.