No es un secreto que las organizaciones se enfrentan a múltiples desafíos que requieren una extraordinaria resiliencia, rápida respuesta y flexibilidad, en donde la tecnología y la ciberseguridad juegan un rol fundamental. Las empresas de los diferentes sectores requieren de una infraestructura tecnológica completa que permita tener alta disponibilidad, protección e innovación.
Una empresa Ciber-resiliente debe tener la capacidad de enfrentar, resistir, adaptarse y recuperarse de los desafíos de seguridad y mantener a flote su negocio. Las organizaciones, Internet, la tecnología de la información, el desafiante mundo digital, la comunicación y los delincuentes cibernéticos son algunos de los elementos que nos rodean, convirtiéndose en un ecosistema que aumenta cada vez más, y así mismo, aumenta los desafíos digitales en todos los sectores a nivel mundial.
La ciberseguridad cada vez es más importante, tanto las empresas como sus clientes, proveedores y cadenas de suministro deben sentir confianza en el entorno digital, además de conocer los canales y activos digitales. Pero, vivimos en una realidad, en donde muchas empresas no identifican todos sus activos digitales, por ende, no los protegen y no están preparados para afrontar los grandes desafíos cibernéticos, mientras que los ciberdelincuentes evolucionan rápidamente y logran sus objetivos de atacar a cientos de empresas.
En los últimos años los ciberataques se han cuadriplicado debido al incremento de los negocios online, nuevas modalidades de trabajo, ampliación de infraestructuras tecnológicas, entre otros; siendo malware, smishing, violación de políticas de escritorio limpio (clear desk), ransomware y phishing, los ataques más comunes. Esto ha llevado a las empresas a adoptar nuevas estrategias de seguridad informática que permitan responder de manera flexible, rápida y segura.
Hoy en día la ciber-resiliencia y ciberseguridad se debe manejar como una estrategia que busca proteger a toda una organización, en donde incluyen el reconocimiento y protección de los activos físicos y digitales, identificación de vulnerabilidades, pronta respuesta a incidentes y capacidad de implementar medidas de seguridad robustas; siendo esto, requisito fundamental para proteger el mundo digital y promover las buenas prácticas de seguridad en las empresas público y privadas.
Desde R-MOR, proveedor líder de ciberseguridad, se ha identificado que la gestión de la superficie de ataque externo (eASM por sus siglas en inglés) es un enfoque proactivo que ayuda a identificar, evaluar y mitigar las posibles amenazas de seguridad de los activos digitales de una organización. Para aquellos que no están familiarizados, eASM, es un enfoque proactivo en ciberseguridad que implica identificar, administrar y asegurar todos los activos digitales que se poseen o interactúa con su red interna protegida; esto podría incluir: aplicaciones web, dispositivos IoT, servidores en la nube, dominios, IP o incluso componentes de software obsoletos, todos los cuales podrían convertirse en puertas de entrada para ataques cibernéticos.
Estos son algunos puntos, que pensamos pueden ser importantes para proteger los activos digitales de las organizaciones:
• Anticiparse a las amenazas cibernéticas
• Contar con una estrategia de ciberseguridad que incluya sistemas de monitoreo continuo y alerta de amenazas potenciales a su superficie de TI externo
• Realizar mapeo de activos de TI de todo tipo para garantizar que sean dispositivos legítimos y automatizar el descubrimiento de activos digitales.
• Realizar análisis de dominios, con el fin de proteger la IP, descubrimiento de activos desconocidos, proteger la marca y minimizar los ataques
• Mitigar vulnerabilidades, tapar brechas, responder frente a los desafíos cibernéticos ya sean humano o tecnológico.
• Priorizar riesgos: una vez que haya identificado las posibles vulnerabilidades y riesgos, implemente una herramienta de administración de la superficie de ataque externo
• Supervisar los cambios y evaluar el ecosistema de terceros: la gestión de la superficie de ataque externa también puede ayudarle a supervisar los cambios en la infraestructura de TI o nuevos proveedores.
Por lo anterior, es importante resaltar que las soluciones eASM debencombinar la innovación tecnológica con la inteligencia humana para verificar alertas y agregar contexto para ayudar a priorizar los esfuerzos de remediación. Al hacerlo, las empresas pueden reducir su superficie de ataque externo, mejorar su postura de seguridad y reducir el riesgo de una violación de datos. Una vez que se identifican estas vulnerabilidades, las organizaciones pueden tomar medidas para remediarlas y reducir su superficie de ataque, como parchear software, deshabilitar servicios innecesarios o implementar controles de acceso más sólidos.
En resumen, la gestión de la superficie de ataque externo puede ser una herramienta valiosa de ciberseguridad para las actividades de fusiones y adquisiciones, ayudándole a identificar posibles vulnerabilidades y riesgos asociados con la infraestructura y los datos de TI de la empresa objetivo.
¡El éxito de las empresas está en contar con la mejor estrategia de ciberseguridad y ciberresiliencia para evolucionar!