El SAI, imprescindible en oficina y hogar

En una coyuntura donde las personas utilizamos equipos electrónicos para trabajar, es especialmente importante disponer de Sistemas de Alimentación Ininterrumpida (SAI/UPS). Los cortes eléctricos originan el 40% de las pérdidas de datos.

Dentro de la sede empresarial es imprescindible contar con un equipo que proporcione suministro limpio, por lo que el tipo más utilizado suele ser el SAI On-line de doble conversión, que transforma la corriente alterna en continua y otra vez en alterna, proporcionando el mejor de nivel de seguridad a las cargas y optimizando la calidad de la red eléctrica en los dispositivos. Se dimensiona a las necesidades de potencia a través de instalaciones en paralelo o modulares y, ante una interrupción eléctrica, sigue alimentando las estructuras de datos para seguir funcionando con normalidad, sin tener que esperar al reinicio de infraestructuras importantes, o como mínimo, permiten prever un cierre ordenado y un apagado programado. Por sus ventajas, la tecnología IoT es clave en este tipo de soluciones.

Por lo que respecta al hogar, aunque un gran volumen de personas utiliza ordenadores portátiles dotados de batería, en caso de un corte de energía eléctrica se pueden perder la conexión a red si no se tiene un sistema de protección en router. Hay equipos específicos de SAI DC, que proporcionan incluso horas de autonomía para dispositivos de 12V. Hay personal con necesidades de hardware específicas que requieren ordenadores de sobremesa, conectados directamente a la red eléctrica. También periféricos necesarios para la salud en el puesto de trabajo, como pantallas de visualización, que en caso de corte dejan de estar operativas. Por ello es muy recomendable un SAI de torre, que permite la conexión de distintos equipos electrónicos. Los Off-line garantizan continuidad frente a un corte eléctrico, aunque los más habituales son los que cuentan con tecnología Live-Interactive, que incorporan un estabilizador automático de tensión.

Así pues, los SAI proporcionan energía eléctrica ininterrumpida a todos los dispositivos y protección frente a perturbaciones, por lo que permiten continuar trabajando sin interrupciones.