Especial
04
Feb
2019

Ciberseguridad y análisis de los datos, grandes retos de la Transformación Digital del Sector Sanitario

El pasado 24 de enero, el sector sanitario fue el protagonista del encuentro que organizó la Asociación @asLAN en el marco de sus Coloquios - Desayunos Sectoriales: “Tecnología en Sectores Clave de la Economía española”, y que cuentan con el apoyo del Área de Promoción Empresarial de la Comunidad de Madrid para su desarrollo.

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Estos eventos tienen como objetivo ayudar a las organizaciones a afrontar un presente y futuro condicionado por su agilidad para adoptar nuevas capacidades y procesos apoyados en la tecnología. Hay que tener en cuenta que las nuevas tecnologías son un pilar fundamental de la Transformación Digital y también dan la capacidad de competir, generar valor y diferenciarse de la competencia.

Encuentros como este ayudan a las empresas a acelerar su transformación, creando puntos de encuentro y marcos de reflexión donde conocer y compartir distintas visiones – no sólo de los responsables IT, también de negocio. El objetivo es agilizar la Transformación Digital, para que ninguna empresa se quede atrás, y crear proyectos exitosos.

En esta ocasión, se invitó a los responsables de Tecnología del Hospital de Día Pío XII, Clínica Santa Elena, Sermas, Bristol-Myers, Novartis, Cofares y Hospital Son Espases de Palma, junto con asociados a @asLAN con experiencia en el sector socio sanitario.

Cómo aprovechar las oportunidades y afrontar los retos del nuevo “escenario hiperconectado” fueron los principales aspectos que se abordaron en un coloquio donde primaron los proyectos en marcha, la situación actual del sector IT en el ámbito de la salud o cuáles van a ser los desarrollos a futuro.

Sector complejo: grandes volúmenes de información y gestión de datos críticos

El Sector Sanitario es un sector complejo que debe afrontar múltiples retos. El primero de ellos es la gestión de grandes volúmenes, por un lado, de pacientes y, por otro de datos críticos. Decían algunos de los asistentes que es el único sector al que nunca le van a faltar “clientes”, aunque el objetivo es que con la implantación de tecnología su número se reduzca en la medida de la posible tanto porque se mejore la accesibilidad al sistema sanitario, como porque se gestionen mejor los recursos limitados de los que se dispone.

En este sentido, habría que hablar de los altos costes a los que se debe hacer frente, por ejemplo, el 80% del gasto se destina a enfermos crónicos. Una cifra que teniendo en cuenta la pirámide poblacional – con el alto nivel de envejecimiento – podría seguir creciendo.

A esto se suma la escasa financiación que reciben los departamentos de IT de este sector (hoy en día el presupuesto destinado a TIC es del 1,7%). Algo que les obliga a trabajar con planes a largo plazo.

Y si bajamos un peldaño más, también hay que afrontar el necesario reciclaje de los profesionales sanitarios y el cambio de mentalidad y de procesos de trabajo, con escasa formación TIC. O los silos de información y la descentralización de infraestructuras de aplicaciones que ponen en riesgo datos, pero también disponibilidad de los sistemas.

El sector salud es un sector estratégico para España y no sólo actualmente, también en los próximos años. Nuestro país es uno de los que mejor posicionados está en términos de implantación de las TIC en el sector sanitario – ocupa el sexto lugar en Europa – por delante de otras potencias europeas como Alemania o Francia. Únicamente nos superan los países nórdicos.

Por eso, los responsables de IT del este sector, tanto del ámbito privado, como público señalaron que tienen una muy buena oportunidad en estos momentos para poner en marcha desarrollos que les ayuden a afrontar todos estos retos. Empezando por el del envejecimiento de la población.

Envejecimiento de la población

La pirámide poblacional es clara, cada vez somos más mayores y vivimos más. Esto significa que habrá más enfermedades crónicas asociadas a la edad, que el número de pacientes aumentará y que esto repercutirá en un mayor gasto sanitario y, probablemente, una peor atención. Si no se hace frente a este gran reto, la sanidad será insostenible.

En este sentido, la Transformación Digital y el uso de las nuevas tecnologías tienen mucho que aportar. En este momento ya existen dispositivos de geolocalización para personas mayores y también para aquellas con discapacidad visual y auditiva. Su objetivo, integrar a estos pacientes en los nuevos paradigmas de comunicación con el entorno sanitario.

Es igual de importante, explicaban los responsables de IT, que haya un cambio de relación con la sanidad, provocado por las nuevas tecnologías, dispositivos y comunicaciones. Y también un cambio de modelo de servicio. ¿Por qué no utilizar mensajes SMS para la recepción de resultados que eviten ir a consulta si no es necesario?

La sanidad debe enfocarse en el paciente, también en el mayor de 60 años. En poco tiempo, el 35% de la población será senior.

Ser capaces de aunar pacientes, clínicos y gerencia es otro de los retos de los departamentos de IT del sector sanitario.

Integrar al paciente, al profesional sanitario y a la gerencia

Las diversas dificultades de este sector condicionan sus proyectos de transformación y obligan a que esta tenga que integrar pacientes, profesionales sanitarios y gerencia hospitalaria. La Transformación Digital debe facilitar el acceso al sistema sanitario de los pacientes, mejorar el cuidado de los enfermos crónicos, ahorrar costes y optimizar recursos y facilitar la información a los profesionales para mejores diagnósticos.

Veamos estas tres vertientes de forma desglosada y qué objetivos debe tener la tecnología en cada uno de ellos.

Pacientes: hay que fomentar tecnología que facilite el acceso al sistema sanitario, como los portales de pacientes o la cita online. Junto a ello, hay que contemplar desarrollos que garanticen la equidad en los tratamientos y que ayuden a medir, comparar y exportar buenas prácticas. La calidad, en el ámbito de la salud, se debe medir en los resultados y en la seguridad de los pacientes. La tecnología debe ayudar a minimizar errores – que en el caso de la salud conllevan tratamientos más largos, secuelas o incluso la muerte.

Para ello, proporcionar al clínico la información para facilitar la toma de decisión irá en mejora de la seguridad del paciente. Ya existen proyectos de seguridad, relacionados con la transfusión de sangre gracias a sistemas de chequeo.

Profesionales:

Administración: el objetivo es la eficiencia, es decir, ser capaces de prestar el servicio con una mejor gestión. En este caso, se apuesta por la Telemedicina para enfermos crónicos. Ofrece ahorro de costes y seguridad porque permite tener un panel de control que alerta de cuándo es necesario realmente intervenir.

En todos los casos, garantizar la seguridad de la información, aplicaciones, redes y accesos es imprescindible. De hecho, un estudio del Foro Económico Mundial equipara el impacto de los ciberataques al de los desastres naturales. Es necesario, por tanto, saber cómo actuar y qué elementos asegurar.

Ciberseguridad: cómo actuar

Como quedó patente durante el desayuno, la calidad del dato que permita obtener información útil para la toma de decisiones – que en este sector se convierte en mejores tratamientos, diagnósticos y buenas prácticas – es un elemento clave de la Transformación Digital.

Unido a este aspecto, hay que ir un paso más allá hacia la protección de la información, mediante el uso de elementos y herramientas de ciberseguridad. La preocupación ante ataques que expongan datos críticos y confidenciales de los pacientes está en la mente de los CIO por lo que señalan que la realidad de la seguridad es el plus adicional que garantiza las explotación del dato de forma segura. Y es un camino en el que todavía hay mucho por hacer.

Para el sector sanitario, farmacéuticas, hospitales… es obligatorio dar saltos adicionales en ciberseguridad que permitan utilizar de forma eficiente y eficaz la información del y para el paciente. Este debe recibir su información y tratamiento de forma eficiente, eficaz y segura.

Es más, la ciberseguridad es un campo donde actuar tanto a nivel nacional, como en Europa, puesto que no hay que olvidar que la movilidad de los pacientes es cada vez mayor. En la seguridad del dato hay que contemplar, por tanto, cómo el ciudadano puede aprovechar su historial clínico en otros países.

De hecho, en Europa existen ya hoy proyectos de movilidad que incluyen políticas de acceso e identidad; y reglamentos sobre buenas prácticas y formas de acometer la seguridad de los datos en el sector sanitario.
Un dato, proporcionado por uno de los asistentes, lleva a la reflexión: en la dark web, se paga más del doble por un informe clínico de un paciente que por una tarjeta de crédito.

Por todo ello, los participantes en el coloquio señalaron la necesidad de colocar al paciente en el centro de los nuevos desarrollos tecnológicos, aunque debe hacerse de forma colaborativa, tanto con los profesionales (clínicos), como con la industria TIC.

Innovación: desde la Historia Clínica Electrónica a la Inteligencia Artificial
Junto con la ciberseguridad, la Transformación Digital implica otros desarrollos, algunos con más trayectoria que otros en el sector sanitario de nuestro país. Entre los proyectos ya consolidados destacan: la instauración de la Historia Clínica Electrónica, la solicitud de cita multicanal/online, la receta electrónica, la tarjeta sanitaria y la firma electrónica.

Sin embargo, antes de ellos, las mejoras en comunicaciones, con la llegada de las redes MPLS, permitieron: crear conexiones más estables; mejorar la conectividad y hacer posible la centralización y consolidación de infraestructuras; así como evitar los silos de información y que sea posible compartirla.

Con todo ello, el futuro pasa por herramientas digitales que ya cuentan con pruebas de concepto:

  • Impresión 3D: sobre todo en las áreas de Traumatología, para obtener modelos antes de intervenciones quirúrgicas para así optimizar resultados;
    Imagen 3D: que aunque implica gran capacidad de almacenamiento, es una técnica destacada para mejorar diagnósticos;
    Big Data y Machine Learning: permiten al profesional analizar y extraer información de calidad desde los datos clínicos de los pacientes y optimizar la toma de decisiones médicas;
    Inteligencia Artificial (IA): mediante la creación de asistentes que ayuden a los profesionales clínicos obtener segundas opiniones a través del análisis de la información.
    Virtualización de aplicaciones y del puesto de trabajo: ahorra costes y mejora la seguridad de acceso.
    Movilidad: se valoran proyectos para la optimización del “triaje” de pacientes con los datos que se puedan incluir en aplicaciones móviles y que se crucen con historia clínica.
  • E incluso la posibilidad que desde un dispositivo móvil se puedan conocer los resultados de pruebas diagnósticas, hablar con el médico o dar un aviso de emergencia.
  • Tecnología cuántica: hoy en día hay cinco ordenadores cuánticos en el mundo, tres de ellos pertenecen a farmacéuticas. Para algunos asistentes, su capacidad de análisis permitirá establecer un mapa del genoma con el que crear de forma conjunta con los laboratorios medicinas individualizadas, personalizadas y sin efectos colaterales.

En todos estos proyectos es importante contemplar la necesaria formación del equipo médico y del resto de profesionales sanitarios. Una de las ramas que hay que potenciar, junto con la asistencia sanitaria y la investigación. Es el momento de que la tecnología apoye estas otras vertientes para hacer grandes cosas que repercutan en un mejor trabajo de los profesionales.

En estos momentos, comentaban algunos de los expertos, la formación se está reduciendo a conocer el manejo de la aplicación. La transformación tecnológica se está haciendo fuera del sistema, así que sería necesario cambiar los planteamientos y pensar que los desarrollos tecnológicos pueden apoyar aspectos médicos.

Así se acabaría también con otro problema, y es que el autoaprendizaje está llevando a utilizar tecnologías que no están estandarizadas ni securizadas, como pueden ser las aplicaciones comunes de mensajería instantánea.

Con el objetivo de fomentar los planes formativos, la investigación y el propio desarrollo tecnológico es fundamental establecer marcos de colaboración con terceros.

Mejora de la colaboración con la industria TIC

La industria tecnológica debe hacer algo más, comentaban los responsables de TI. No es suficiente con la tecnología, sino que es necesario crear soluciones que especifiquen ahorros. Algo, que señalan, no existe hoy en día. Y reclaman a la industria tecnológica que sea más activa en la búsqueda de estas herramientas. La cercanía con la industria ayuda a generar proyectos e innovación y el contacto con el profesional médico permite saber en qué dirección trabajar.

La colaboración con terceros, por tanto, es el futuro y la mejor forma de conseguir optimizar el servicio para todos los actores que componen este sector y para proporcionar un valor añadido al paciente. Establecer entornos de colaboración con la industria va a hacer posible resultados científicos de impacto que sean medibles.

Medición y publicación científica: dos pilares de apoyo

Precisamente, durante el desayuno se hizo hincapié en la necesidad de identificar los indicadores clave y de, a partir de ellos, generar proyectos valiosos. A esto se suma la obligación de medir para poder difundir nuevos modelos de emprendimiento.

En este sentido, se explicó la importancia de la publicación científica como plataforma de lanzamiento y divulgación. Algo a lo que no están acostumbrados en el sector TI y que se torna imprescindible para implantar sistemas que cambien paradigmas o formas de trabajar de los profesionales médicos.

Los proyectos que puedan tener su hueco en la publicación científica deben basarse en datos concretos que den valor a los profesionales y a la gerencia.

La medición de precisión es el futuro de la medicina. Y, de nuevo, se basa en el dato, el del paciente, el de la estadística alrededor de una enfermedad, el de un tratamiento, etc. Es el dato el que permitirá ofrecer a los pacientes la mejor medicina.

Conclusiones

Ser capaces de extraer la calidad del dato y establecer criterios y elementos de ciberseguridad que protejan información sensible y confidencial de los pacientes son los principales retos a los que se tienen que enfrentar los responsables de tecnología de las organizaciones del Sector Sanitario.

A esto hay que sumar la capacidad para integrar el factor humano (pacientes, profesionales y gerentes), así como aunar la asistencia sanitaria, con la formación y la investigación.

Hoy, dicen los responsables de IT es el momento de actuar y de buscar e incentivar el talento y la productividad.

Todavía queda mucho camino para hacer que los pacientes no acudan nada más que en el momento necesario a los hospitales y cambiar la percepción de cómo los usuarios son atendidos.

Ya hay acceso a toda la información, ahora toca extraer la máxima calidad a esos datos y hacer proyectos que con poca inversión obtengan grandes beneficios.

Coloquio - Desayuno "Transformación del Sector Sanitario"