El 40% de todos los correos electrónicos entrantes suponen una amenaza potencial, incluyendo el spam, el phishing y las amenazas avanzadas como el fraude del CEO y cualquier tipo de malware. Al ser el principal medio de comunicación de las empresas, el correo electrónico es una de las principales puertas de entrada de la ciberdelincuencia y sigue siendo un vector de ataque de primer orden. Por todo ello es fundamental un enfoque integral, desde la detección de las ciberamenazas hasta la concienciación y formación de toda la organización para su prevención, pasando por la solución de backup que gracias a su granularidad permite la continuidad del negocio en caso de consumación del ataque.