Valfar: Herramienta de ayuda a la validación farmacéutica
El proyecto «Inteligencia Artificial para mejorar los servicios públicos» de OSI Ezkerraldea Enkarterri Cruces fue finalista a la XIV de los premios@aslan en la Categoría <strong> ciberseguridad y resilencia</strong>
Antecedentes
Antes de la creación de Valfar, se empleaban bases de datos Access, con información procedente del día anterior, para realizar la validación transversal, es decir para seleccionar a los pacientes cuyo tratamiento puede ser susceptible de optimización en función de unas reglas de validación previamente definidas por los/as farmacéuticos/as. Al no llegar la información a tiempo real, se revisaban muchos casos en los que, o bien la situación clínica del paciente había cambiado o bien el médico ya había detectado el problema, con lo cual la revisión no aportaba ningún beneficio al paciente. Además, se dependía totalmente del departamento de informática cada vez que se quería introducir cualquier nueva consulta. El detonante para iniciar el desarrollo de Valfar fue el cambio de software de los laboratorios de Análisis Clínicos de Osakidetza. Con el cambio no era posible disponer en las bases de datos Access, lo cual inhabilitaba la mayoría de reglas de validación disponibles en ese momento.
Retos
1) Obtener la información a tiempo real, para evitar revisar problemas ya resueltos
2) Hacer más sencilla la creación de reglas de validación para que sean creadas y actualizadas desde el Servicio de farmacia, con nula o mínima intervención por parte del Servicio de Informática, siendo las funciones de éste, la gestión de usuarios y mantener estable la aplicación.
3) Ampliar el tipo de información disponible para la validación transversal, incorporando diagnósticos, alertas, peso y talla, tratamiento habitual,etc.
4) Conseguir que, si la situación clínica cambia tras haber intervenido sobre un paciente, éste vuelva a ser captado por la regla de validación para la revisión y validación de su tratamiento.
5) Disponer un histórico de los tratamientos revisados y de las intervenciones realizadas, así como de su grado de aceptación, de cara a poder dar datos de actividad y poder analizar qué reglas son las que más valor aportan.
Fases
Los recursos empleados fueron, en todo el desarrollo del proyecto, un informático y dos farmacéuticos, aunque en ningún caso la dedicación al proyecto fue del 100% de la jornada.
Se planteó un proyecto en tres fases:
1) Desarrollar una herramienta que supliera las funcionalidades que estaban aportando las bases de datos de Access, puesto que éstas iban a dejar de funcionar.
2) Desarrollar otras funcionalidades que el Servicio de Farmacia había ido solicitando en años previos y a las cuales hasta ese momento no se había podido dar respuesta.
3) Ampliar las funcionalidades de validación que el programa podía aportar incorporando diagnósticos, datos microbiológicos, alertas, estratificación poblacional etc.
Nuevos Servicios
Se trabajó con un equipo formado por dos farmacéuticos y un informático. Los costes económicos fueron nulos, pues las tres personas ya estaban contratadas por Osakidetza antes del inicio del proyecto. Sí existieron costes de oportunidad, ya que el tiempo dedicado a este proyecto no pudo ser empleado en alcanzar otros objetivos. Al no existir costes directos, cualquier intervención que haya contribuido a una optimización de la farmacoterapia del paciente ha dado lugar a una mejora en la eficiencia.
Actualmente, se realizan unas 150.000 validaciones diarias con Valfar: conciliación de tratamientos, interacciones farmacológicas, evaluar riesgo de caídas ajuste por insuficiencia renal, calcular digoxinemia, detectar pacientes en riesgo de desnutrición y muchas otras funcionalidades que siguen en desarrollo. La gran versatilidad de Valfar ha permitido que se haya implantado con éxito en los distintos hospitales de Osakidetza y en los centros sociosanitarios del País Vasco.
Conclusiones
La creación de Valfar ha supuesto una importante mejora en la validación farmacéutica y, probablemente, también en la seguridad y resultados en salud de los pacientes ingresados en los hospitales de Osakidetza. Las principales mejoras aportadas: información en tiempo real y autogestión de las reglas por parte de los servicios de farmacia, han abierto un enorme campo de posibilidades de mejora que aún hoy, años después de la creación del programa, sigue en desarrollo.