Cuando en el 2018 comentábamos estudios como “Cloud Computing en España 2018” que anunciaban que en 2019 el Cloud sería clave para la empresa española, con partidas emergentes y/o relevantes en los presupuestos de las compañías, era para todos impensable vaticinar la que se nos venía encima… ¡Afortunadas aquellas empresas que comenzaron el 2020 con una estrategia multicloud ya integrada!
Hace ya unos cuantos años que iba aumentando el número de organizaciones que se estaban sumando a la integración de la nube en alguna de sus formas (privada, IaaS, SaaS o PaaS) como estrategia ya no solo de almacenamiento, sino también de optimización de recursos, reducción de costes y eficiencia. Ahora bien, la deslocalización ha sido, sin lugar a dudas, una de las ventajas que más se ha podido disfrutar durante todo el Estado de Alarma y el consiguiente despliegue de equipos remotos, extendido aún en gran medida en la actual Nueva Normalidad.
No obstante, frente a las bondades como la flexibilidad, la rentabilidad o la deslocalización del multicloud, nos encontramos con el reto para la seguridad que conlleva. Porque las compañías han de poder amoldarse a circunstancias tan disruptivas como las originadas por la pandemia de la COVID-19, pero también han de estar protegidas frente a los ciberataques que durante este último periodo se han disparado exponencialmente. Precisamente aprovechando las brechas del teletrabajo. Asegurar la continuidad del negocio no debe ir en detrimento de la ciberseguridad, sino todo lo contrario, han de ser fieles aliados.
Tanto la empresa como el proveedor cloud han de velar de forma conjunta y sinérgica por la ciberseguridad de los entornos desplegados. Lo ideal es que la organización cuente en plantilla con un CISO que vaya de la mano del proveedor. La elección de éste último es clave.
Existe una gran oferta de nubes en el mercado con diferencias significativas entre ellas. Los factores fundamentales a la hora de valorar qué proveedor va a atesorar la información y el dato de una compañía, su intangible más preciado, son: el grado confianza, la experiencia y trayectoria en este tipo de servicios, la transparencia en los alcances y en los costes, y, esencial, que disponga de un equipo técnico detrás disponible 24/7 para atender al cliente de forma rápida y ágil en aquellas dudas o incidencias que puedan surgir.
Es cierto que la ciberseguridad al 100% no existe. Quien lo ofrezca estará ocultando experiencia y conocimiento, o estará revelando la falta de los mismos. Pero sí que podemos afirmar que el entorno multicloud seguro es posible.
En AlhambraIT, para controlar y garantizar la calidad de nuestros servicios, contamos con una plataforma Cloud distribuida, completamente de nuestra propiedad. Ésta cuenta con las máximas certificaciones de calidad y seguridad (las ISO 20001, 22301, 27001 y 27018, GDPR Compliance y Neutral CO2) y, además, gracias a las alianzas que mantenemos con los principales fabricantes, ofrecemos flexibilidad, escalabilidad y personalización en cada uno de nuestros servicios. Todo ello sin costes ocultos y con facilidad de entrada y salida.