Cada compañía puede organizar su viaje a la nube centrándose en distintas motivaciones: la financiera, como un medio para reducir costes; la referente al negocio, para incrementar la agilidad y, finalmente, la motivación estratégica, que sitúa a la nube como piedra angular del proceso de transformación.
Los costes son un factor clave, pero el ahorro de moverse a la nube puede no ser el esperado debido a un exceso en el aprovisionamiento y por los costes de las licencias.
Para controlar los costes de la nube hay que plantear una serie de cuestiones:
- ¿Cuánto se está pagando por el software on-prem?
- ¿Cómo se pueden optimizar los costes de software teniendo en cuenta los cambiantes programas de los proveedores?
- ¿Cuánto se paga por las licencias de bases de datos propietarias? ¿Es posible encontrar una vía de modernización a través de una infraestructura de base de datos cloud abierta o de un servicio gestionado?
- ¿Se cuenta con la arquitectura cloud óptima para dar respuesta a las necesidades del negocio?
Cuando el factor de más peso sea la evolución del negocio, es conveniente evaluar la capacidad de la nube para soportar la actividad de la empresa.
El departamento IT debe proporcionar soluciones a los retos que se plantean, y dependiendo de su respuesta será visto como un freno o como un catalizador de la innovación. Cuando la tecnología se percibe como un aliado es porque ha propuesto una arquitectura cloud diseñada para el cambio:
- Moviéndose de forma decidida hacia la contenerización, apoyando CI/CD y el desarrollo ágil.
- Migrando a la computación sin servidor.
- Aplicando tecnologías de IA/ML.
- Ofreciendo nuevos avances en servicios cloud y propuestas capaces de hacer posible lo que antes no lo era.
En el caso en el que la motivación principal sea estratégica, la aplicación de técnicas de Design Thinking ayudará a trazar el camino de la migración en un ejercicio de varias fases:
- Empatizar con los usuarios. El departamento IT puede convertirse en un habilitador de negocio si comprende mejor los desafíos de los usuarios con respecto a las aplicaciones y los sistemas.
- Definir las necesidades del usuario. Aplicando su conocimiento sobre la tecnología y colaborando con los responsables de Negocio, el departamento IT puede definir las necesidades de las personas.
- Idear soluciones innovadoras: Trabajando juntos, Tecnología y Negocio pueden formular opciones innovadoras ante los problemas identificados.
- Prototipar para crear soluciones. La nube es un entorno hecho a medida para la creación iterativa de prototipos.
- Probar las soluciones. Es posible que haya que mejorar el enfoque adoptado y aplicar técnicas de desarrollo ágil.
Todas las empresas tienen a su disposición una gama de servicios cloud cada vez mayor, por lo que saber elegir los más adecuadas resulta un desafío. Contar con ayuda experta que sepa mover las aplicaciones a la nube, reducir los costes relacionados con las licencias y alinear la innovación que ofrecen los proveedores cloud con la estrategia de la compañía, es recomendable para tener un viaje a la nube tranquilo, seguro y rentable.