En los últimos años ha aumentado el uso de lo que se denomina nube híbrida, es decir, un entorno informático en el que se combinan tanto la nube privada como la nube pública a través de la virtualización de datos, funciones de red (NFV) o VPN y la conectividad entre dichas nubes. Inicialmente, las nubes híbridas se habían considerado una herramienta para que las empresas comenzaran a probar los servicios que ofrecían las nubes. Sin embargo, actualmente se han convertido en un facilitador indispensable de la transformación digital.
Es tal la importancia que la nube híbrida ha adquirido en los últimos años que, según una encuesta realizada en 2021 por The Harris Poll y patrocinada por Microsoft, “el 86% de todos los encuestados planea aumentar la inversión en entornos híbridos”. Asimismo, Horacio Morell, presidente de IBM España, Portugal, Grecia e Israel, afirma que “la nube híbrida, sin duda, será una tendencia tanto en 2023 como en los años venideros, por ser un imprescindible para las empresas”.
A medida que las organizaciones se han digitalizado, el volumen de datos a gestionar ha sido cada vez mayor, por lo que las nubes híbridas han evolucionado para adaptarse a las necesidades de los usuarios. Este año se prevé un aumentado en la administración del Edge Computing a través la nube digital, siendo el Edge Computing una herramienta de procesos computacionales que ejecuta la gestión de datos lo más cerca posible de su origen. La administración del Edge Computing por la nube híbrida facilitará a las empresas una mayor velocidad, seguridad y escalabilidad de sus datos, tanto en su nube privada como en la pública.
A su vez, en 2023 se impulsará la estandarización de las nubes híbridas para reducir la complejidad en su uso, por lo tanto, los equipos TI se encargarán de mitigar esta barrera. Además, cada vez más CIO comenzarán a usar las nubes híbridas y accederán a sus beneficios, como un mayor rendimiento, ahorro de costes o escalabilidad de la información. Al mismo tiempo, sectores como el de las telecomunicaciones, apostarán por las infraestructuras híbridas con el objetivo de brindar un mejor servicio a sus usuarios.
En 2023, la nube híbrida estará cada vez más presente en el sector empresarial, impulsando la eficiencia, la innovación, la flexibilidad y la seguridad de cada organización, convirtiéndose en una herramienta esencial en su día a día para lograr alcanzar sus objetivos.