En el panorama de la ciberseguridad, en rápida evolución, Secure Access Service Edge (SASE) ha surgido como una fuerza transformadora, marcando el comienzo de una nueva era de seguridad de la red. La revolución SASE está llegando rápidamente, por lo que ahora es el momento de que las organizaciones determinen si están preparadas para adoptarla y comprender los beneficios que aportará. Según el informe 2023 de Gartner®, se prevé que el mercado de SASE crezca de 7.000 millones de dólares en 2022 a 25.000 millones en 2027, con una CAGR del 29%.
SASE tiene sus orígenes en las redes de área extensa definidas por software (SD-WAN), una tecnología que revolucionó la forma en que las organizaciones gestionan su infraestructura WAN. SD-WAN introdujo flexibilidad y adaptabilidad en las conexiones WAN, permitiendo a las empresas optimizar tanto el rendimiento como los costes en entornos híbridos y multicloud. Al responder a las expectativas cambiantes de las empresas, dar cabida al desarrollo de nuevos modelos de prestación de servicios y reforzar las defensas frente a las ciberamenazas, SASE se perfila como una tecnología verdaderamente vanguardista.
La red es un punto de partida crucial para cualquier estrategia de seguridad. Al fin y al cabo, es el conducto de todos los datos y el tráfico. La amenaza que suponen los ciberataques para las empresas, tanto grandes como pequeñas, nunca ha sido tan real ni tan urgente como en la actualidad. Aunque el modelo de trabajo remoto cloud-based ofrece ventajas significativas, también ha hecho que sea considerablemente más difícil proteger adecuadamente una red. Al supervisar y analizar el tráfico y los comportamientos de la red, la información recopilada puede introducirse en herramientas de ciberseguridad. Estas herramientas, aprovechando el poder de la IA y el aprendizaje automático, pueden identificar y responder a actividades potencialmente maliciosas.
Los despliegues de SASE pueden adoptar diversas formas, desde soluciones SaaS y NaaS sencillas hasta plataformas totalmente a medida creadas por los proveedores. El modelo de despliegue ideal depende de los requisitos particulares y las inclinaciones de la empresa. Las pequeñas empresas pueden encontrar en las ofertas SaaS y NaaS una respuesta práctica y económica, mientras que las grandes empresas pueden inclinarse por un enfoque más personalizado para mejorar el control de su infraestructura de seguridad.
La necesidad de Secure Access Service Edge (SASE) se remonta a la demanda general de mayores funcionalidades de red y ciberseguridad. Según Gartner®, la rápida proliferación de conexiones, conectividad de alta velocidad, servicios basados en la nube y dispositivos inteligentes han impulsado significativamente esta tendencia.
Gartner estima que el 30% de las empresas adoptarán capacidades relacionadas con SASE este año, tales como secure web gateways (SWGs), cloud access security brokers (CASBs), zero-trust network access (ZTNA), y firewall as a service (FWaaS). También estima que el 60% de las empresas habrán esbozado estrategias y calendarios para la adopción de SASE antes del año que viene.
El panorama de las ciberamenazas está cambiando rápidamente, y los ataques complejos son cada vez más frecuentes. Las empresas, a las que se confían datos sensibles e infraestructuras críticas, son objetivos prioritarios del ciberespionaje. Para hacer frente a esta amenaza creciente, las empresas deben invertir en soluciones de ciberseguridad de vanguardia y aplicar estrategias de ciberdefensa sólidas. La supervisión continua, la recopilación de información sobre amenazas y la respuesta proactiva ante incidentes son esenciales para crear sistemas resistentes.
SASE representa claramente la próxima generación de seguridad de redes. Ofrece una solución unificada que combina funciones de seguridad basadas en la red con el conocimiento de las aplicaciones y la gestión de servicios basada en la nube. Como revela el Informe sobre la Red Global 2022-23 de NTT, el 95% de las organizaciones reconoce que los modelos de trabajo híbridos requieren una mayor inversión en protección y seguridad de datos. Las empresas comprenden la necesidad de una inversión continua en un futuro en el que el trabajo híbrido y las aplicaciones basadas en la nube son la norma. Para muchas, SASE ofrece el enfoque ideal.
A medida que SASE continúa desarrollándose, está bien situado para convertirse en el punto de referencia de la seguridad de las redes empresariales. Su capacidad para hacer frente a los retos del entorno empresarial moderno, combinada con su modelo de entrega basado en la nube, lo convierte en un componente crucial de la estrategia de seguridad de cualquier organización. Esto representa un cambio fundamental en la forma en que las empresas y organizaciones abordan la seguridad de las redes.
Las empresas dependen cada vez más de las aplicaciones en la nube y de los trabajadores remotos, lo que crea la necesidad de soluciones de seguridad integrales. Al combinar la seguridad de la red, el conocimiento de las aplicaciones y la gestión basada en la nube, SASE ofrece una solución unificada y holística. Este enfoque aborda eficazmente los retos del entorno empresarial dinámico e interconectado de hoy en día. Como resultado, SASE desempeñará un papel clave en la salvaguarda de las redes de las empresas y en la protección de sus valiosos datos.
En esta era de transformación digital, SASE surge no como una tecnología más, sino como un catalizador estratégico para las organizaciones. Al adoptarla, las empresas se embarcan en una trayectoria hacia una infraestructura de red preparada para el futuro, flexible y segura. Una infraestructura flexible, segura y en línea con las necesidades cambiantes de los usuarios, los modelos de prestación de servicios y el cambiante panorama de la ciberseguridad. El camino a seguir es inequívoco; SASE sirve como estrella guía para las empresas que buscan el éxito en la era digital.