En base a diferentes estudios de mercado e informes, Extreme Networks ha recogido en un documento las principales tendencias que en opinión de la compañía definirán el mercado de redes corporativas en 2022, en los diferentes segmentos de mercado:
- Networking/Cloud/entornos distribuidos
- Multi-layered Networking. El concepto de red “multicapa” es un nuevo planteamiento de arquitectura que ha surgido en los últimos años, a medida que las redes se han hecho más complejas y distribuidas. En 2022 cogerá impulso este planteamiento, que supera el concepto binario tradicional hardware/software, y que plantea contemplar la red de una manera integral y holística, incorporando también la nube y los entornos de conectividad remotos o distribuidos. Como comenta John Morrison, VP Senior EMEA de Extreme Networks, “este planteamiento es esencial para dar respuesta a las necesidades de conectividad de las organizaciones de hoy día, altamente complejas y distribuidas, como son una gran capacidad de escalar, conocer a los usuarios dondequiera que estén y ofrecer una experiencia de uso centrada en el usuario y sus necesidades. Romper con esta perspectiva binaria y darse cuenta de que la tecnología de red es mucho más poderosa y flexible será la clave del éxito de las empresas en 2022 y más allá».
- SDN (Software-Defined Networking). SDN seguirá siendo una tecnología crucial debido al crecimiento de la computación en la nube, el aumento en el uso de dispositivos móviles y la necesidad de reducir costes de despliegue, configuración y gestión de red. SDN permite diseñar, desplegar y gestionar la red separando los planos de control y datos, eliminando la infraestructura subyacente para aplicaciones y servicios de red y haciendo que el plano de control sea directamente programable. Gracias a SDN es posible distribuir la capacidad de computación a sitios remotos, mover las funciones del centro de datos al extremo de la red y dar mejor soporte a nuevas tecnologías como “cloud computing” o IoT.
- Redes autónomas basadas en IA. En 2022 se avanzará en la aplicación de tecnologías de Inteligencia Artificial a la gestión de red, para acercarse a lo que se denomina “Redes Autónomas” y evolucionando desde una automatización básica hacia la red totalmente autónoma. Esta automatización reducirá la implementación manual y la intervención en áreas como la planificación, el aprovisionamiento, la prestación de servicios y las operaciones de red. Esta tendencia vendrá impulsada por la creciente complejidad de la red y la necesidad de realizar cambios en un entorno cambiante, que evoluciona muy rápidamente, muchas veces desbordando la capacidad de los departamentos de TI para llevar a cabo esos cambios de forma manual.
- Home Networking. La tendencia aparecida con la pandemia de crecimiento del trabajo remoto y las oficinas domésticas seguirá consolidándose y creciendo, a pesar de la prevista vuelta al trabajo presencial. Los entornos de trabajo se han flexibilizado y distribuido. Esto planteará retos de gestión que los responsables de TI deberán abordar, e incrementará la demanda de soluciones de red más sencillas de gestionar, seguras y rápidas.
- Entornos Cloud mixtos: Distributed Cloud. La diferenciación entre nube pública, privada, híbrida y on-premise se difuminará cada vez más, de forma que los usuarios podrán disfrutar de las ventajas de ambos mundos. El planteamiento de Distributed Cloud permitirá obtener todo el potencial y flexibilidad de la nube utilizando servidores privados locales. La tecnología cloud y los datos asociados a estas plataformas residirán en las instalaciones del usuario, proporcionando computación local, control total y los beneficios operativos de la nube.
- Inteligencia Artificial aplicada a las operaciones de TI (AIOps). Es otra tendencia tecnológica en alza que afectará a la gestión y soporte de infraestructuras de red. Se trata de utilizar la potencia de la IA como herramienta que ayude a facilitar, automatizar y reducir errores en la gestión y configuración de la red. Esta tecnología ayuda a interpretar los datos y entender mejor los procesos de negocio, para que los departamentos de TI puedan responder mejor a las alertas e incidencias, incluso antes de que se produzcan.
- Tecnologías Wi-Fi
- Consolidación de Wi-Fi6 y despliegue de Wi-Fi6E. 2022 será un año de consolidación de este estándar inalámbrico para entornos corporativos, debido a varias ampliaciones tecnológicas que incrementarán las posibilidades de despliegue y el rendimiento de las redes Wi-Fi. Por otro lado, se espera la puesta en producción del nuevo estándar WI-FI6E, que opera en la banda de frecuencia de 6 GHz. Esta banda ya está abierta en EE.UU. y en algunos países europeos, aunque la directiva comunitaria establecía el 1 de diciembre para su habilitación en toda la Unión Europea. Por otro lado, ya están apareciendo en el mercado los primeros dispositivos con soporte Wi-Fi6E.
Según un estudio de la firma de analistas 650 Group, en los próximos años se acelerará la adopción de Wi-Fi6E en el mercado, ya que se prevé que para esa fecha habrá a nivel mundial más de 350 millones de dispositivos que admiten 6 GHz, así como un crecimiento de más del 200% en el despliegue de puntos de acceso Wi-Fi6E en entornos corporativos.
- Seguridad de red
- Estrategias Zero Trust. Los ataques sofisticados y complejos que se han producido en el último año han hecho que cada vez más organizaciones estén evaluando la implementación de tecnologías Zero Trust para ayudar a protegerse contra este tipo de eventos. Probablemente en 2022 se pueda conocer el resultado de esta estrategia de seguridad adoptada ya por muchas compañías y se puedan identificar las mejores prácticas de uso de esta estrategia.
- Blockchain como tecnología de seguridad. Se habla cada vez más en el mercado de la utilización de las tecnologías de blockchain como mecanismos para proteger los datos personales y las infraestructuras en entornos de smart cities. A medida que las smart cities se acerquen al desarrollo completo, las tecnologías de blockchain se volverán mucho más frecuentes y se utilizarán para proteger la integridad de la información dentro de la infraestructura de la ciudad inteligente, y la información personal crítica. Blockchain también desempeñará un papel en la protección de las identidades digitales, así como en la protección frente a la «guerra cibernética» (ataques a la cadena de suministro o a infraestructuras críticas, securización de procesos electorales).