La tecnología es cada vez más importante para la competitividad de los negocios. Pero al mismo tiempo, su gestión se está haciendo más compleja. Por ello, la opción de los servicios gestionados está cobrando cada vez más fuerza.
La idea central de estos servicios es que las empresas focalicen sus recursos disponibles en la actividad nuclear de sus negocios y que se beneficien de la posibilidad de optar por servicios gestionados por empresas especializadas para aquellas actividades que no forman parte de su actividad nuclear, pero que son críticas para el negocio.
Las ventajas de los servicios gestionados son múltiples. Al no ser necesario adquirir infraestructura física, reducen los costos. Proporcionan acceso a expertos especializados que dominan las últimas tendencias en redes inteligentes. La empresa proveedora de servicios gestionados se encarga de mantener y actualizar constantemente sus servicios para garantizar la mejor calidad posible y garantizan la continuidad del negocio incluso en situaciones de crisis, como desastres naturales o ataques cibernéticos.
El modelo NaaS
Una de las propuestas en auge para gestionar la red empresarial es el modelo Naas (Network as a Service), que permite operar fácilmente la red y lograr los resultados que esperan de ella sin poseer, construir o mantener una infraestructura propia. Este modelo transfiere la responsabilidad del diseño, la integración, la configuración, el rendimiento, la capacidad y la gestión del ciclo de vida a un proveedor de soluciones NaaS, liberando al cliente final de esta tarea.
El modelo Naas incluye todos los elementos de la red empresarial y su gestión: hardware, software, servicios, gestión y licencias correspondientes a infraestructuras de red que se consumen según un modelo de consumo flexible o basado en la suscripción. De esta forma, las empresas externalizan el aprovisionamiento, la implementación, la gestión de la red, el mantenimiento y la gestión del ciclo de vida de la infraestructura de red.
Estamos ante una forma flexible de consumir infraestructura de red. Una fórmula altamente demandada por las organizaciones que buscan adaptarse continuamente a los constantes cambios que requieren sus negocios y beneficiarse al mismo tiempo de todas las innovaciones tecnológicas para dar un mejor servicio a sus clientes, pero ajustando al máximo sus inversiones en tecnología.