El año 2020 ha sido muy relevante para la industria de Internet, con un impulso a la digitalización sin precedentes debido al impacto de la pandemia provocada por la COVID-19. Las empresas que están ampliando su oferta digital están apostando por la conectividad como uno de sus principales pilares. Además, tecnologías como el edge computing y el 5G están llegando a la gente de a pie.
En este sentido, acabamos de comenzar un año clave que invita a hacer varias preguntas: ¿qué aspectos serán importantes en este 2021 para las empresas, los proveedores de cloud y de servicios de Internet? ¿Continuará el impulso digital que ha traído el coronavirus durante este nuevo año? DE-CIX, operador líder global de puntos de intercambio de Internet, analiza las cinco claves sobre el futuro de las conexiones y de la interconexión de Internet en 2021.
- Resiliencia de las redes ante el auge del cloud
Tras la coyuntura vivida, los proveedores y las empresas han aprendido de manera muy precisa sobre lo que una conexión a Internet debe proporcionar. Las conexiones directas a un proveedor cloud, también conocidas como conectividad cloud o cloud on-ramping, son ya un aspecto importante en la industria, y cobrarán mayor importancia en 2021.
Cada vez son más los servicios que están migrando a la nube y es algo que ya estaba ocurriendo antes del coronavirus. Por eso, uno de los retos a los que se enfrentan las compañías es qué hacer en caso de que haya un corte de conexión, ya que esta tecnología depende completamente de ello. Por este motivo, en 2021 el foco se pondrá en mejorar la resiliencia de las redes.
More and more services are migrating to the cloud, and this is not only since Corona – but what do companies do in the event of an outage? On August 30, 2020, network problems at the US provider CenturyLink led to Internet outages worldwide. In 2021, we will see an increasing focus on resilience – as part of increasingly specific ideas as to what an Internet connection must be able to provide.
Cada vez son más los servicios que están migrando a la nube, y no solo debido a la llegada del Covid, pero ¿qué ocurre si hay un corte de conexión? En agosto del pasado año, la empresa distribuidora CenturyLink tuvo problemas en su red que ocasionaron cortes en las redes de Internet de todo el mundo. Por ello, en 2021 el foco se pondrá en mejorar la resiliencia de las redes para que apagones como este no provoquen un parón de la actividad mundial.
- La interconexión se convertirá de nuevo en un factor básico
Hasta ahora las empresas han optado por el outsourcing y la subcontratación de aspectos relacionados con la conectividad, bien por falta de conocimientos a nivel interno o para ahorrar costes. Sin embargo, hoy en día, la seguridad, la gestión de datos y la experiencia del usuario han hecho que las compañías decidan gestionar internamente este aspecto.
Sin ir más lejos, en la industria de la automoción las empresas ya han comenzado a desarrollar sus propias infraestructuras internas. Los servicios digitales de un automóvil -como las advertencias sobre el tráfico, las actualizaciones periódicas de software y las aplicaciones centradas en el usuario- van a ser tan importantes para los consumidores como el propio chasis. Por lo tanto, los fabricantes de automóviles han decidido tener el control de sus conexiones de red para garantizar una alta calidad constante. Al igual que la industria automotriz, muchas otras industrias experimentarán el mismo proceso en 2021 – y la interconexión volverá a ser un factor clave.
- La importancia de contar con una infraestructura digital
En 2020, el coronavirus impulsó la digitalización, además de dar mayor visibilidad a muchos proyectos de este ámbito y demostrar la resistencia de la infraestructura digital. El teletrabajo y el uso de plataformas de videollamadas se ha convertido en algo habitual, y este año se ha producido un crecimiento enorme de las soluciones de trabajo y colaboración en la nube. Esta tendencia continuará en 2021, aunque no con la misma intensidad que el año pasado.
Por este motivo, en el primer semestre de 2020 se adelantaron muchas inversiones previstas: la infraestructura y la digitalización marcaron la pauta y se aumentó enormemente el ancho de banda para hacer frente al aumento del tráfico. En la «nueva normalidad» la atención seguirá centrada en la expansión de las infraestructuras digitales, incluso aunque la gente vuelva a la oficina. De la misma manera que muchas inversiones se adelantaron en 2020, se espera que algunas se retrasen hasta la segunda mitad del 2021.
- Edge computing y 400 GE serán una realidad debido al 5G
Este año podemos esperar un impulso real y perceptible del 5G, pues ya hay en el mercado una gran oferta de smartphones compatibles con esta tecnología y las redes se desplegarán masivamente este año, al menos en las ciudades y alrededores. Una vez que esté al alcance de gran parte de la población, se verá un desarrollo importante de nuevos usos como la realidad virtual en juegos o servicios de streaming más sofisticados. Además, el 5G llevará la interconexión en el ámbito industrial a otro nivel. Por ejemplo, en el futuro, los coches necesitarán tomar «decisiones» vitales en base a los datos, por lo que hay que asegurarse de que este procesamiento de datos sea directo e inmediato. El requisito teórico de latencia en una emergencia es inferior a 1ms. Un coche conectado conlleva un gran número de sensores y también puede considerarse un centro de datos móvil con necesidad de conexión en el edge.
Esto requiere el despliegue generalizado de las torres 5G y las funciones de edge computing en los centros de datos, así como la conexión de fibra óptica asociada a los centros de datos remotos y soluciones cloud regionales.
En el área de grandes infraestructuras se verá un salto muy notable: todas las redes principales llevarán la tecnología 400GE. Hasta ahora, esta tecnología ha sido muy costosa, pero en 2021 será más asequible y por lo tanto estará ampliamente disponible. Esta combinación de redes notablemente más rápidas y el aumento de la computación en el edge es muy prometedora para proveedores y empresas.
- GAIA-X seguirá su desarrollo
GAIA-X se puso en marcha en 2019 con el objetivo de desarrollar una infraestructura digital de confianza y soberana para Europa, que también integre a otros actores mundiales. Este año, la iniciativa ya proporcionará una base sólida para una moderna infraestructura de datos de próxima generación para satisfacer las necesidades futuras de las empresas, la ciencia y la sociedad.
DE-CIX, como uno de los 22 miembros fundadores europeos, aportará su infraestructura de interconexión a GAIA-X. Esto representa una parte esencial para la base de los servicios digitales de GAIA-X. Además de DE-CIX, existen otros puntos de intercambio de Internet importantes y el panorama de los intercambios europeos de Internet está mucho más desarrollado que el de Norteamérica o Asia. Al reunir a los IX europeos para formar una infraestructura de intercambio de Internet, pronto será posible garantizar un acceso bastante fluido, en toda Europa, a las aplicaciones de GAIA-X. Por primera vez, esto permitirá no sólo aplicaciones de baja latencia, sino también aplicaciones que exigen la máxima protección de los datos sensibles, por ejemplo en atención sanitaria y en la conducción autónoma.
«En 2021 el foco estará en desarrollar diferentes tipos de conexiones específicas para nuevos grupos de destinatarios y aplicaciones dedicadas. Las empresas están haciendo de la conectividad una competencia básica de nuevo», ha señalado el Dr. Thomas King, CTO en DE-CIX. “A principios de la década de los 2000 pudimos ver un enorme crecimiento en innovación en el mundo de Internet. Tal vez, en 2021, podamos revivir esta época y utilizar el impulso del Coronavirus para mantener un buen ritmo de innovaciones” añade King.