2019 será un año que marque un antes y un después en la forma en que las empresas protegen y gestionan sus datos. Esta es la conclusión de Vincenzo Costantino, director técnico de Commvault para el Sur de EMEA, que ha resumido algunas tendencias que veremos el próximo año en esta industria. Estas son sus impresiones:
La cultura del dato – conocer más que almacenar
En los últimos años, se ha convertido en un hábito para las organizaciones recopilar y retener la mayor cantidad de datos posible.
La idea es simple: cuantos más datos se tenga, más valor se podrá obtener de ellos de cara al futuro. Sin embargo, este año las empresas se han dado cuenta de que esto no es así. De hecho, la normativa está obligando a lo contrario.
En 2019 las empresas invertirán cada vez más en pasar de la actual cultura de datos disfuncional a un modelo en el que la gestión de los datos esté más automatizada y dirigida a los procesos.
Esto incluirá tecnologías que pueden ayudar a descubrir, perfilar, mapear y saber qué datos se mantienen, independientemente de dónde se almacenen: en las instalaciones del cliente, en la nube/SaaS o en dispositivos de usuario.
Con este conocimiento, las organizaciones pasarán de tener datos aislados e irrelevantes que aumentan artificialmente, a un lugar donde la calidad de los datos es lo más importante. Este enfoque llevará a reducir costes, disminuir el perfil de riesgo con respecto al cumplimiento, y a obtener un mejor posicionamiento para lograr sus objetivos comerciales.
Edge Computing cambiará la forma en que gestionamos los datos
A pesar de la prisa por migrar a la nube y el advenimiento del IoT, nuestra infraestructura de TI aún está muy centralizada. En 2019, comenzaremos a ver un cambio con el aumento de Edge Computing, o computación perimetral, que permitirá que los datos producidos por IoT y dispositivos móviles en el ‘borde’ de la red corporativa, se procesen donde (o cerca de donde) se crean los datos. Esto impulsará innovaciones tales como los vehículos autónomos y ciudades inteligentes. Comprensiblemente, también se generarán nuevos desafíos en torno a la seguridad, y la gestión de la velocidad y del tipo de datos que las organizaciones pueden capturar. Veremos emerger nuevos mediante la combinación de fuentes de datos públicas y privadas provenientes de Edge Computing que sin duda se incorporarán a más proyectos de inteligencia artificial y de datos en tiempo real.
La computación cuántica podría cambiar por completo la forma en que hacemos cálculos
Los fundamentos de cómo procesamos la información podrían estar a punto de cambiar con la computación cuántica empresarial. Estas ofertas de computación cuántica proporcionarán un nuevo poder de cálculo, que aún está en gran medida en manos del mundo académico. Sin embargo, hacia finales de 2019, podríamos comenzar a ver los primeros ejemplos comerciales reales de computación cuántica en áreas como el almacenamiento y la criptografía. Habrá que estar atentos.
2019 no será el año de blockchain
Blockchain se ha promocionado a lo largo de 2018 por tener el potencial de revolucionar y reemplazar la tecnología tradicional de gestión de datos, como señaló Gartner a principios de este año. Sin embargo, todavía existe una gran cantidad de confusión acerca de cómo se puede implementar blockchain de forma práctica en casos de uso de la vida real.
A pesar de todo el ruido que se ha hecho, 2019 no será el año de blockchain, ya que las industrias continúan experimentando para encontrar ejemplos prácticos de casos de uso. Hasta que no haya una comprensión más amplia por parte de la industria sobre el potencial y la realidad de esta tecnología, incluida la forma en que se ajusta a la normativa de protección de datos como GDPR, es poco probable que blockchain se convierta en la norma en 2019 para las empresas.